La primera vuelta del campeonato 1980/81 el equipo iba segundo en la clasificación y todo hacía presagiar una gran temporada, sobre todo tras haber conquistado la Supercopa de Europa en diciembre, pero una malísima racha de resultados en la segunda vuelta hicieron al equipo caer hasta el sexto puesto. A esto se sumó una afición molesta con el juego y con la directiva de José Ramos Costa por haber traspasado a Kempes a River Plate por 300 millones de pesetas en el mes de marzo tras la 27.ª jornada.